El ADN de la Infidelidad: ¿Está en Nuestras Venas?

Básicamente se puede heredar la tendencia a la infidelidad aquí detallaremos mas sobre este tema.

7/21/20232 min read

El ADN de la Infidelidad: ¿Está en Nuestras Venas?

¡Ey, amigos! Les traigo un tema que seguramente les dejará con la boca abierta. La infidelidad siempre ha sido un asunto intrigante, y ¿qué pensarían si les digo que podría estar vinculada a nuestros genes? ¡Sí, leyeron bien! Los científicos han estado investigando esta posibilidad, y los resultados son de no creer.

Diversos estudios han arrojado luz sobre las razones detrás de la infidelidad y cómo podría estar relacionada con nuestra genética. Las investigaciones realizadas por la Universidad de Binghamton y la Universidad de Nueva York nos revelan que existe una base genética para la infidelidad, y que esto también podría estar conectado con ciertas adicciones. ¡Guau!

La sospechosa número uno: La vasopresina

¿Se preguntan qué hormona es la sospechosa número uno? ¡La vasopresina! Esta hormona no solo es responsable de mantenernos bien hidratados, sino que también parece tener un papel importante en nuestro comportamiento humano y en nuestros vínculos sexuales. ¿Quién lo diría? Pero eso no es todo, amigos.

El poderoso gen DRD4

El gen DRD4 también se ha convertido en una pieza clave en este rompecabezas. Puede que no sea tan conocido como otros, pero es poderoso. Este gen se encarga de producir dopamina en nuestro cerebro, la hormona del placer, y puede ser el motor detrás de nuestras acciones más atrevidas.

Los investigadores de la Universidad de Nueva York se pusieron manos a la obra y analizaron el ADN de nada más y nada menos que 200 voluntarios. ¿Y adivinen qué encontraron? Aquellos que tenían una variación específica en el gen DRD4, conocida como 7R+, tenían una mayor tendencia a ser infieles en sus vidas. ¡Sorprendente! De hecho, aproximadamente la mitad de las personas con esta variación confesaron haber sido infieles de manera habitual, en comparación con solo el 22% de aquellos que no tenían esta peculiar variante genética.

Sin distinciones de género

Y aquí viene la noticia bomba: ¡no hay una gran diferencia en términos de infidelidad entre hombres y mujeres! La variación 7R+ se encontró en un 23% de mujeres y un 26% de hombres. Así que, amigos, parece que el gen de la infidelidad no hace distinciones de género.

¿Qué conclusiones podemos sacar de todo esto? Bueno, es importante tener en cuenta que estos estudios se encuentran en una fase inicial, y aunque sugieren una posible relación entre nuestros genes y la tendencia a la infidelidad, no podemos saltar a conclusiones definitivas. La infidelidad es un tema complejo, y otros factores, como los aspectos psicológicos, emocionales y sociales, también influyen en nuestras elecciones en las relaciones.

Así que ahí lo tienen, queridos lectores. La infidelidad podría estar escrita en nuestro ADN, pero eso no significa que debamos justificarla o permitirla. Al final del día, siempre tenemos la capacidad de tomar decisiones conscientes y responsables en nuestras vidas amorosas. ¡La ciencia no deja de sorprendernos, y el tema de la infidelidad sigue siendo un enigma fascinante que nos invita a seguir explorando!

Fuentes:
Salud 180. com
Fayer Wayer. com